Materiales usados en la arquitectura del quattrocento
Entre los materiales más usados en la época del Quattrocento debemos mencionar el marmol, la piedra y el ladrillo. En numerosos casos, los espacios interiores de los edificios eran adornados con mármoles y estucos.
El renacimiento busco la recuperación de los elementos formales de la arquitectura clásica, que se emplearán en este período adaptándose a las nuevas necesidades generadas a partir del s. XV. Por ejemplo, entre los elementos sustentantes se retomaron los órdenes arquitectónicos clásicos (dórico, jónico, corintio, toscano y compuesto) con sus debidas proporciones matemáticas. Las columnas clásicas no sólo soportaron el peso de estructuras arquitrabadas en los alzados, sino también de arcos de medio punto, que volvieron a ser empleados en la arquitectura con las medidas propias de la época romana. Por otro lado, entre los elementos sostenidos se volvieron a emplear según su uso en la arquitectura clásica, las cubiertas adinteladas, las bóvedas de medio cañón y las cúpulas, decoradas con los ornamentos más asiduos en las construcciones romanas. La cúpula, sobre todo en la arquitectura religiosa, se convirtió en un símbolo del universo y de la perfección.
El renacimiento busco la recuperación de los elementos formales de la arquitectura clásica, que se emplearán en este período adaptándose a las nuevas necesidades generadas a partir del s. XV. Por ejemplo, entre los elementos sustentantes se retomaron los órdenes arquitectónicos clásicos (dórico, jónico, corintio, toscano y compuesto) con sus debidas proporciones matemáticas. Las columnas clásicas no sólo soportaron el peso de estructuras arquitrabadas en los alzados, sino también de arcos de medio punto, que volvieron a ser empleados en la arquitectura con las medidas propias de la época romana. Por otro lado, entre los elementos sostenidos se volvieron a emplear según su uso en la arquitectura clásica, las cubiertas adinteladas, las bóvedas de medio cañón y las cúpulas, decoradas con los ornamentos más asiduos en las construcciones romanas. La cúpula, sobre todo en la arquitectura religiosa, se convirtió en un símbolo del universo y de la perfección.
El marmol se utilizaba más que todo en las construcciones internas de las obras, para dar un toque de decoración y elegancia a la arquitectura.